Participantes (adolescentes)

  • Llega a tu taller listo a vivir una experiencia increíble y diferente a lo que estas acostumbrado.

  • Llega dispuesto a ser escuchado, valorado, respetado por quién eres, por tus ideas y lo que es importante para ti.

  • Prepárate para aprender de los de los demás de una forma única, basada en el respeto y valor por quién cada participante es y lo que podemos aprender de ellos.

  • Ven dispuesto a escuchar las ideas, principios, valores y lo que hace que la vida tenga un significado de cada participante y prepárate para descubrir lo que te apasiona en la vida y que hace que tu vida sea extraordinaria.

  • Trae ropa cómoda, te ofreceremos un ambiente relajado, divertido que te retará ha conocer lo mejor de ti y de los demás, respetando tu espacio personal y aquello que quieras o no compartir dentro del taller.

  • Ven a conocer un lugar donde tendrás un espacio como nunca has conocido para ti, lleno de retos personales enfocados a conocer lo mejor de ti mismo, valorando aquellas cosas que no son tan lindas de ti y qué, a pesar de eso, te hacen ser increíble dado que también son aspectos de tu vida que aprenderás a valorar y a utilizar cuando sean necesarios.

  • Llega dispuesto a darte cuenta cómo personas que ni conoces, pueden respetarte y valorarte por quién tú ya eres.

Papás: acerca de tus hijos en el curso

  • Recuerda que están empezando a vivir un “proceso” de vida que requiere de aprender cosas nuevas, ponerlas en práctica, equivocarse y volver a ponerlas en práctica; es el principio de un camino, ¡apóyalos a ser principiantes!

  • Dado que la vida humana es la maquinaria más precisa, algunas veces tus hijos realizarán cambios milimétricos y poco palpables para ti, confía en que ellos están aprendiendo a auto ajustar sus conductas, formas de pensar, maneras de ver el mundo, de aceptar, de hablar, de pedir perdón, de decir lo que sienten… es un proceso de múltiples ajustes durante y después del curso.

  • Pueden existir ciertos momentos y cambios que puedes percibir como radicales, apóyalos y confía en que ellos mismos están aprendiendo un camino nuevo y mucho tiene que ver con lo que tú ya les has enseñado.

  • Busca respetar su nuevo espacio, sabemos que quieres que te cuenten “todo”, recuerda que en este proceso, a veces puede rebasar su capacidad de ponerlo en palabras simples, dales tiempo a que ellos mismos le den un significado propio a lo que están viviendo y estén listos para compartírtelo, respeta sus materiales del curso, ellos merecen este espacio de tu parte. Pero, cuando estén listos para compartir, cuida que nada ni nadie lo impida.

  • Evita utilizar el curso como un arma de manipulación como “¿Para eso vas al curso?, ¿Eso te han enseñado…? Recuerda que los resultados de este “proceso” se van a ir dando y madurando con tus hijos, cada uno a su tiempo, no necesariamente en el tiempo que tú quisieras, confía en ellos, es como una semilla que sembramos, no necesariamente va a germinar cuando pensamos, pero vale la pena cuidarla, regarla y cultivarla hasta que florezca.

¡Te esperamos!